Estocolmo es una ciudad peculiar. Y es que la capital sueca se sostiene sobre un archipiélago: 14 islas y 57 puentes que te hacen recorrer sus calles casi sin darte cuenta. Un detalle que la hace muy fotogénica, incluso en sus días más nublados. No en vano es una de las ciudades más bonitas de Europa y sabe lucirse mucho más en primavera o en verano, lejos de sus fríos más intensos.
Pensando en eso, te vamos a contar sobre 10 lugares imprescindibles que ver en Estocolmo en 3 días; los museos que no te debes perder y algunas excursiones que puedes hacer a los alrededores.
10 cosas que ver en Estocolmo en 3 días
1. Gamla Stan, la ciudad vieja
Toda la esencia de Estocolmo se resume en Gamla Stan, la ciudad vieja. Se levanta sobre la isla de Stadsholmen y data del siglo XII. Allí podrás ver la parte más colorida de la capital: casas de colores, calles estrechas, muchos cafés, tiendas de artesanías y antigüedades.
La plaza Stortorget es la más atractiva de todo el lugar, con las casas medievales de colores que pertenecían a la nobleza sueca. Además, fue en esta plaza donde tuvo lugar el famoso Baño de sangre de Estocolmo (una masacre en 1520) y donde también podrás ver el Museo Nobel, que recorre la historia de los famosos premios.
Puedes hacer un free tour por Estocolmo, con un guía en español, quien te contará los puntos claves de este lado de la ciudad.
2. Palacio Real de Estocolmo
Uno de los imprescindibles que ver en Estocolmo en 3 días, es el cambio de guardia en el Palacio Real. Se celebra todos los días a las 12.15 hrs y dura 40 minutos. Es la excusa perfecta para luego animarse a visitar el Palacio que -con sus más de 600 estancias- es uno de los más grandes de Europa.
Quizá no sabías que fue construido en el siglo XVIII sobre los restos de un antiguo castillo medieval y que el rey de Suecia sigue trabajando desde allí. Otro dato: puedes entrar a las caballerizas, sin costo alguno, y ver los carruajes históricos de la familia real de Suecia durante generaciones.
3. Parlamento de Suecia
¿Te imaginas un edificio que ocupe casi toda una isla? Es lo que ocurre con el Parlamento de Suecia, que está sobre la isla de Helgeandsholmen. Pasar por allí es algo que no debe faltar cuando decidas visitar Estocolmo, pues asombra su construcción, la historia y la modernidad.
El Riksdag -su nombre en sueco- tiene siete edificios conectados de manera subterránea y podrás ver varias estancias: la sala donde los diputados toman decisiones, la gran escalera de mármol por donde accede el rey, la antigua biblioteca o el corredor de comunicación: un pasillo de 45 metros que era utilizado para que los diputados pudieran debatir en secreto y que hoy se utiliza como salón de fiestas.
4. Catedral de San Nicolás
En pleno corazón del Gamla Stan y muy cerca del Palacio Real, aparece la Catedral de San Nicolás, la más importante de la ciudad. A simple vista es una construcción modesta, de ladrillo, pero allí se han celebrado coronaciones y bodas reales desde 1279.
Es un lugar clave que ver en Estocolmo, pues alberga la famosa escultura medieval de madera de San Jorge y el dragón, que simboliza la victoria de Suecia sobre Dinamarca. Además de la Vädersolstavlan, la pintura más antigua de Estocolmo que representa a un fenómeno astronómico de la Edad Media.
5. Ayuntamiento de Estocolmo
Si algo hay que ver en Estocolmo es, sin duda, su Ayuntamiento. Se levanta sobre la isla Kungsholmen y lo reconocerás por su torre y la arquitectura de ladrillo. En su interior, hay dos salas que se llevarán por completo tú atención.
El Salón Azul, donde se celebran cada año los Premios Nobel y el Salón Dorado, el más impresionante, pues está decorado con 18 millones de azulejos que cuentan la historia de Estocolmo.
Además, podrás subir a su torre de 160 metros de altura y tener una de las mejores panorámicas de la ciudad. Es uno de los edificios favoritos de los suecos y vaya que tiene razones para que sea así.
6. Parque Kungsträdgården
Kungsträdgården es el parque más visitado en el centro de Estocolmo. Está justo al frente del muelle de Strömgatan y es el punto de encuentro por excelencia para locales y turistas. Lo llaman Kungsan, para resumir, y allí podrás disfrutar de hermosas vistas, cafés, restaurantes y galerías de arte.
Además, gracias a su cercanía al Palacio Real, durante el siglo XVI fue considerado el Jardín del Rey y era la zona de esparcimiento de los monarcas. Luego, se convirtió en parque de entrenamiento del ejército, pero sin perder su esencia real y elegante que sigue hasta el día de hoy.
Hay un free tour por los misterios y leyendas de Estocolmo que comienza en Kungsträdgården y en el que también pasarás por el Palacio Real y Gamla Stan, con un guía en español.
7. Barrio de Södermalm
Si hay un lugar que ver en Estocolmo es el barrio de Södermalm. Está al sur de la ciudad vieja, sobre una isla que lleva el mismo nombre y está considerado como el barrio más alternativo de la ciudad.
Allí entrarás en un ambiente bohemio, con galerías de arte, museos, restaurantes, muchos cafés y tiendas de antigüedades. Lo mejor es que desde allí tendrás una de las inigualables vistas sobre Estocolmo si vas a cualquiera de sus dos miradores: el ascensor Katarina o el Sky View.
Si tienes la suerte de un día despejado, no dudes en subir para ver el atardecer. Aunque cualquier día merece la pena.
Te recomendamos este free tour por el barrio de Södermalm para que conozcas por qué es tan atractivo y todo, con un guía en español.
8. Östermalms Saluhall
Saluhall significa “mercado” en sueco, y el mejor de todos lo vas a conseguir en el glamoroso barrio de Östermalms. Está allí desde 1880 y es un buen lugar para respirar la esencia de la ciudad, además de conocer su gastronomía.
Por fuera, es una gran estructura de ladrillo, con hierro forjado y madera que llama mucho la atención. Por dentro, cobra vida, ruido, olor y mezcla cientos de sabores. Tiene cafeterías y puestos de comida, en los que todo luce apetitoso y delicado.
Puedes conseguir desde frutas, vegetales hasta productos típicos suecos. Recuerda mucho al más famoso de los mercados de Madrid: el mercado de San Miguel.
9. Plaza Sergel (Sergels torg)
En todo lo que puedes ver en Estocolmo en 3 días, no puede faltar la plaza Sergel, epicentro de la parte más nueva de la ciudad. Desde allí podrás ir a la Kulturhuset, un centro cultural repleto de bares y galerías.
También caminarás hasta el Haymarket, que es un famoso mercadillo de frutas, flores y ropa. Y, lo mejor, tendrás acceso a Hötorgshallen, un mercado subterráneo con una gran variedad de alimentos frescos y comidas preparadas. Lugares en los que podrás respirar la esencia sueca desde varios ángulos.
Puedes hacer este free por la ciudad nueva de Estocolmo, con un guía en español, para conocer más detalles sobre los lugares y belleza.
10. Metro de Estocolmo
El metro de Estocolmo está considerado la galería de arte más larga del mundo. Son 110 kilómetros de túneles y estaciones llenos de creatividad y curiosidades que puedes recorrer con tan solo tener un ticket sencillo de metro (válido por 75 minutos).
Comenzó a ser intervenido con arte en 1957 para llenar de color los espacios subterráneos de la ciudad y ayudar al ánimo sueco (y así no se convertiría en un lugar deprimente). Son en total 100 estaciones y al menos 90 de ellas tienen algún toque artístico que no pasa desapercibido.
Más que ver en Estocolmo en 3 días: la isla de Djurgården y los museos
La isla de Djurgården es un lugar muy natural y tranquilo, a pocas distancia del Gamla Stan, en el que se encuentran la mayoría de los museos de la ciudad. Aunque son muchos, estos son algunos de los que puedes ver en Estocolmo en 3 días, y que no deberían faltar durante tu recorrido.
Si no quieres ir por tu cuenta, te recomendamos este tour por la isla de Djurgården, con transporte en barco y un guía en español.
Museo Vasa
El Museo Vasa es único en el mundo. Alberga a un barco de guerra del siglo XVII que fue rescatado del fondo del mar, después de estar 333 años sumergido. Está muy bien conservado, con el 98% de sus piezas originales y esculturas talladas en madera.
Además de admirar la embarcación, podrás saber más de la historia de navegación y otros detalles. Es uno de los museos más visitados en Estocolmo.
Museo ABBA
¿Quién no ha coreado alguna canción de ABBA como Dancing Queen, Mamma Mia o Chiquitita? La banda sueca que conquistó el mundo en los años 70 y 80, tiene su propio museo en el que podrás ver los trajes originales, curiosidades, grabaciones inéditas, fotografías, premios, discos de oro y mucho más.
Es un museo interactivo, ideal para visitar sin prisas mientras te dejas llevar por la música.
Museo Skansen
Skansen es el museo al aire libre más antiguo del mundo y en el que podrás conocer más sobre la historia de Suecia. Sabrás cómo eran las casas antiguas y cómo vivían los suecos según los cambios de estación, a través de sus tradiciones, trabajos y vida cotidiana. Divierte a niños y a adultos por igual.
Qué ver en Estocolmo en 3 días y sus alrededores
Palacio de Drottningholm
A una hora en barco desde el centro de Estocolmo, podrás llegar a la isla de Lovön, donde se encuentra el Palacio de Drottningholm. Fue construido en el siglo XVI como residencia de verano de la familia real y desde mediados del siglo XX es el hogar fijo del monarca. Los jardines y gran parte de su interior están abiertos al público. Es una de las excursiones desde Estocolmo imprescindibles.
Disfruta de una excursión al Palacio de Drottningholm, de 2 horas de duración y con un guía en español.
Paseo en barco por el archipiélago de Estocolmo
¿Sabías que el archipiélago por donde se extiende Estocolmo tiene más de 24.000 islas? No hay nada mejor que hacer un paseo en barco por los alrededores de la ciudad para disfrutar de esos paisajes naturales. Al mismo tiempo, puedes aprender más de la historia de la capital sueca y cómo se fueron colonizando las islas más grandes.
Disfruta de un paseo en barco por el archipiélago de Estocolmo, de 3 horas de duración y con un guía en inglés.
Senderismo por los bosques de Estocolmo
Después de todo lo que hay que ver en Estocolmo en 3 días, el mejor plan será alejarse del ritmo de la ciudad y disfrutar de la naturaleza.
Los bosques están apenas a 20 km en coche y hay rutas señalizadas para hacer senderismo y desconectar de todo. Una actividad que los suecos suelen hacer con bastante frecuencia.